“Durante los primeros meses de vida de la empresa el riesgo de insolvencia se dispara. Atravesar este valle de la muerte es la diferencia entre una empresa con futuro y la que termina cerrando. Un emprendedor se convierte en empresario cuando la insolvencia deja de ser lo más importante, tiene una cartera de clientes más o menos consolidada y empieza a generar flujo de caja. Entonces entra en juego la rentabilidad. Pero para un emprendedor la rentabilidad no es lo importante, es no morir ... más